CUARESMA: Tiempo de cambio y de esperanza, de meditación y de perdón.
Se inicia
hoy la cuaresma con el miércoles de ceniza. El tiempo cuaresmal es un tiempo de
cambio y de esperanza. Y es de cambio porque el hombre, hecho a imagen y
semejanza de Dios, se ve a sí mismo como un ser mortal pero con alma inmortal.
Este día de
cenizas es un recordatorio ineludible de que nuestra vulnerabilidad y finitud
de la vida nos obliga a mirar al creador, de hacer un viaje interior hasta lo
más recóndito de nuestra alma para ese encuentro con el Señor. Ahí se produce
el cambio y ese cambio genera la esperanza. Esperanza en la inmortalidad de
nuestra alma pues “de polvo somos y en polvo nos convertiremos” pero sólo
nuestro cuerpo físico, nuestro espíritu permanece inmortal.
Cuaresma es
un tiempo de meditación y de perdón. Esforzándonos a despojarnos de las viejas
ataduras y limitaciones del pecado, nuestra alma vuela tan alto hacia el mundo
espiritual que somos capaces de transformar toda nuestra realidad.
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