Hoy se cumple la profecia del profeta Isaías:El pueblo que vivía en tinieblas, vio una gran luz.
Jesus niño nace en un pobre pesebre a las afueras de Belén, la ciudad de David.Jesús, María y José están solos,Pero Dios buscó para acompañarlos a gente sencilla,unos pastores, quizá porque eran humildes y no se asustarían encontrar al Mesías en una cueva envuelto en pañales.
En esta primera noche, sólo en ellos se cumple la profecia: Ven una gran luz,la gloria del Señor los envolvió de claridad. No temáis-les dice el ángel-pues vengo a anunciaros una gran alegría, que lo será para todo el pueblo: Hoy en la ciudad de David os ha nacido el Salvador, el Cristo, el Señor.
Hoy ha nacido el Salvador. No hay lugar para la tristeza cuando acaba de nacer la vida;la misma que acaba con el temor de la mortalidad y nos infunde la alegría de la etenidad prometida.
Cantamos con júbilo en estos días de Navidad porque el amor está entre nosotros hasta el fin de los tiempos. Cuando en el día de hoy nos acerquemos a besar al Niño o contemplemos un Nacimiento, o meditemos en este gran misterio,que agradezcamos a Dios su deseo de abajarse hasta nosotros para hacerse ententer y querer, y que nos decidamos a hacernos también como niños, para poder así entrar un día en el reino del cielo. Termino esta meditación de navidad diciéndole a Dios nuestro Padre : "Concédenos compartir la vida divina de aquel que hoy se ha dignado compartir con el hombre la condición humana".
Pido por toda mi familia, mis añorados y queridos amigos, a tantas personas especiales que forman parte de mi vida que os ilumine la luz de Dios hecho hombre para redimirnos y darnos la eterna felicidad.
Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros.
AGUSTIN
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