El cine ha
perdido dos grandes actores en este pasado fin de semana : Joan Fontaine (96) y
Peter O’Toole (81); ambos excelentes en el arte de representar.
Dueña de
una belleza efémera y algo diáfana, Fontaine me sorprendió en el clásico
REBECA, de 1940, al lado del genial Lawrence Olivier. Ganadora del Oscar en
1941 por SUSPICION (Sospecha) de Hitchcock, Joan era bella, atractiva y
talentosa, adjetivos que difícilmente pueden encontrarse hoy en día en Hollywood, al menos en su
totalidad.
Peter
O’Toole, actor irlandés, injustamente no premiado por el Oscar por su gran
actuación en el clásico LAWRENCE OF ARABIA de 1962, ha descollado en su larga
carrera por varias películas. Sin duda, la famosa música de LAWRENCE DE ARABIA
y los feéricos paisajes del desierto árabe continúan en mi memoria.
Ambos
entraron en la historia cinematográfica mundial.
Y, para mi
sorpresa, me enteré que Joan Fontaine era hermana de Olivia de Havilland, la
gran estrella de LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ.
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