Alto y garboso
Altivo y colosal
Magnánimo y soberano
Enfrentando el viento
Con imperturbable serenidad
El frio del invierno apenas te roza
Y te fortalece aún más
Fuente de descanso, receptor de luz
Te vistes de flores
En las mañanas primaverales
En el otoño, tus hojas secas,
vuelan como remolinos alegres
a tu alrededor,
como mágicas luciérnagas
En verano, ni el rabioso sol
amenaza tu acerada piel
En todo el año, permaneces incólume
Como amigo invisible, como protector solemne
Como eterno surtidor de sombra y sueño
Nenhum comentário:
Postar um comentário